¿POR QUÉ LOS ODS SON IMPORTANTES
PARA EL FUTURO SOSTENIBLE
DE LAS EMPRESAS?
Los criterios de desarrollo sostenible han ido ganando importancia con el paso de los años. La sociedad se ha concienciado de que el planeta no es finito y que es indispensable cuidarlo. Sin embargo, una tarea de tal envergadura no se puede realizar de cualquier manera.
¿En qué consisten los criterios de desarrollo sostenible?
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son un conjunto de metas adoptadas por los líderes mundiales en septiembre de 2015. Abarcan una amplia gama de temas y desafíos globales, entre los que destacan la erradicación de la pobreza y el hambre, la igualdad de género o la acción climática. Al alcanzarlos, se superarán problemas que llevan afectando al ser humano desde hace siglos.
Para garantizar su éxito, cada uno de los 17 ODS tiene una serie de metas específicas y medibles, que se utilizan para evaluar su progreso tanto en lo local como lo global. Además, al estar interconectados, se refuerzan mutuamente, lo que significa que el avance en uno afecta a otros.
Hay que tener en cuenta que se ha marcado un límite temporal de 10 años para alcanzarlos. Pese a que representan un auténtico reto, tanto los poderes públicos como la empresa privada participan en su desarrollo. De hecho, las compañías lo hacen a través del Pacto Mundial de las Naciones Unidas. Se trata de un marco que les ayuda a colaborar y a compartir buenas prácticas en materia de RSC y para cumplir los ODS.
¿Por qué son tan importantes para las empresas?
Los ODS no solo son importantes para los países, sino que también lo son para las compañías. Representan una forma de mejorar sus servicios y productos, al tiempo que su actividad genera más impactos positivos. Los objetivos ayudan a encontrar soluciones a los desafíos sociales, económicos y ambientales de mayor urgencia.
Si se busca alcanzar una empresa sostenible, son un referente que no se puede dejar de lado. Los ODS contribuyen a identificar aquellos puntos en los que la organización no es eficiente. Al actuar siguiendo los criterios planteados, se consigue una operativa que consume menos recursos. También disminuye la contaminación que emitidos.
Otro aspecto importante de mejorar la sostenibilidad en la compañía tiene que ver con el público. La sociedad se ha concienciado de la necesidad de solucionar problemas como la pobreza o el cambio climático. Además, entiende el papel que juegan las empresas y espera de ellas que participen activamente. Por tanto, alinearse con los ODS puede traducirse en una mejora de la reputación y en una nueva forma de generar beneficios.
Ante una situación así, la planificación estratégica debe tener en cuenta la sostenibilidad. Los objetivos que se planteen pueden incorporar parte de los ODS. Asimismo, al ser 17, las posibilidades de adaptación son altas. Cada empresa evaluará en cuáles su aportación será más notoria, algo que se basará en el sector en el que se encuentre.
Un plan estratégico o una estrategia que incluya la sostenibilidad es más completa. No solo presta atención al crecimiento del negocio, sino que también presta atención a factores que hasta ahora pasaban desapercibidos. Por ejemplo, si se fuera a tomar una decisión que condujese a un daño medioambiental, se repensará para que el resultado sea lo menos lesivo posible. Quizás se iba a talar parte de un bosque para construir una fábrica, pero se buscó otro lugar más adecuado.
Con los criterios de desarrollo sostenible, las empresas disponen de una guía que orienta su funcionamiento. Así, contribuyen a la mejora de la sociedad y economía a escala planetaria. Desde sus acciones de marketing a la planificación, el impacto de los ODS se notará en toda la organización.